El blanqueo a través de casinos es un método utilizado por las organizaciones criminales para transformar fondos de origen criminal en dinero legal. Diariamente se mueve en cualquier casino una gran cantidad de dinero en efectivo que cambia de manos bajo las caprichosas reglas del azar. Estas características propias del funcionamiento de cualquier casino, hacen que sea un negocio propicio para las actividades delictivas de las organizaciones criminales.
Un método con casi un siglo de historia
Cuba, 1933. Meyer Lansky, uno de los lideres de la Cosa Nostra se hacía con el control del Hotel Nacional de La Habana y de su casino. Eso supuso el inicio de un lucrativo negocio para la mafia italiana que se mantuvo en funcionamiento hasta la subida al poder de Fidel Castro en 1959.
La ciudad de La Habana se convirtió en un atractivo turístico para miles de norteamericanos que buscaban satisfacer todos los vicios que no podían saciar en su país. Se trataba de un negocio redondo, por un lado, las ganancias derivadas de la propia actividad del hotel y del casino, y por otro la utilización del mismo para blanquear los fondos generados por las actividades delictivas de la mafia.
Frank Sinatra, la mafia y los casinos.
Años después, en 1946, Lucky Luciano organizo en el Hotel Nacional una reunión de la Cosa Nostra a la que asistirían todos sus cabecillas, para decidir cuál sería el futuro de la organización. La reunión contó con todo tipo de lujos para hacer la estancia de los asistentes lo más amena posible. De hecho, Lucky Luciano, contrató para deleitar a los presentes al mismísimo Frank Sinatra, cuya presencia aportó una fachada de legalidad al evento.
Uno de los asuntos tratados en esta reunión fue el negocio del juego que la Mafia tenía en Las Vegas, donde se estaba retrasando la construcción y la puesta en funcionamiento del Hotel Casino Flamingo. La Mafia encontró en los casinos una actividad perfecta para sus actividades y estaba extendiendo sus tentáculos.
Mayor control sobre los casinos
Los casinos de juego se consideran sujetos obligados según la Ley 10/2010 de prevención de blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo. Esto supone que tienen que cumplir una serie de obligaciones para prevenir el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
Deben examinar especialmente operaciones o comportamientos que sean complejos, inusuales, que no tengan un propósito económico o lícito aparente, o que presenten indicios de fraude o simulación. También elaborarán una lista con las operaciones que corran el riesgo de ser utilizadas para el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo, y la darán a conocer a sus directivos, empleados y agentes.
En el caso de los casinos, existe riesgo cuando una operativa no resulta coherente con el perfil del cliente, con el tráfico, actividad usual y razonable del cliente, o con las actividades de juego y compraventa de fichas que son habituales en un casino. Resulta muy ilustrativo el catálogo de operaciones de riesgo en el sector de casinos de juego elaborado por la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias.
Casinos legales y casinos cómplices
Cuando hablamos de blanqueo a través de casinos, hay que especificar que se pueden dar dos situaciones muy diferentes, dependiendo de si el casino tiene o no conocimiento de las actividades criminales que se están llevando a cabo en él.
Por un lado, hay organizaciones criminales que blanquean los fondos que han generado con sus actividades criminales utilizando como instrumento los casinos legales, sin el conocimiento de estos. Por otro lado, hay organizaciones que controlan casinos, que utilizan fundamentalmente para mezclar sus ingresos criminales con los provenientes del casino, y que los primeros retornen limpios al sistema financiero.
Blanqueando con su propio casino
En el caso de que el casino este bajo el control de la organización criminal, y sirva a sus intereses, este puede contabilizar tantas perdidas ficticias de juego de sus clientes como dinero necesite blanquear. Imaginemos que un mes la organización quiere introducir un millón de euros en efectivo procedente por ejemplo del narcotráfico. Solo tiene que declarar que los clientes del casino han perdido ese mes esa misma cantidad, y hacer pasar el dinero del narcotráfico como ingresos del casino.
Técnicas utilizadas en casinos legales
Si hablamos de organizaciones que utilizan casinos legales para blanquear fondos criminales sin su conocimiento, existen infinidad de métodos. Un delincuente puede acudir a un casino, adquirir fichas con el dinero en efectivo que quiera blanquear y cambiarlas de nuevo poco después, incluso sin haberlas utilizado para jugar.
Al cambiar las fichas de nuevo por dinero en efectivo (previo recibo) o por un cheque, este ya tiene un origen licito. En ambos casos, el criminal puede demostrar que dispone de ese dinero porque lo ha ganado en el casino. El método se puede complicar si la persona que compra las fichas, no es la misma que las cambia de nuevo por dinero.
La unión hace la fuerza
Otra modalidad que se puede dar es que varios miembros de la organización compren fichas en un mismo casino por un valor que individualmente no levanta sospechas. Después, todos los miembros le facilitan todas las fichas a una persona que se encargará de cambiar todas las fichas por dinero en efectivo o por un cheque, haciendo pasar toda la cantidad por ganancias del juego.
También se puede dar el caso, de que varios miembros de una organización criminal ocupen todos los puestos de una mesa de póker, y que se hayan puesto de acuerdo previamente para que todos pierdan en favor de un solo miembro, que será el que gane. Esa persona podrá demostrar que el origen de su dinero proviene de los juegos de azar.